Te compras un patinete eléctrico pensando que solo es para ir del punto A al punto B. Y sí, lo hace. Pero al poco te das cuenta de que le falta algo. No porque venga mal, sino porque no está del todo adaptado a ti. A tu ritmo, a tu mochila, a la ciudad que cruzas. Entonces aparecen ellos: los accesorios. Hablamos de esos detalles que marcan diferencia entre lo que se puede usar… y lo que se disfruta.
Este artículo es justo es una conversación sobre los accesorios para patinete eléctrico que realmente tienen sentido. Los que no ocupan espacio en un cajón al mes de comprarlos. Los que hacen que tu patinete funcione mejor, dure más y te lo ponga más fácil.
Lo que nadie te cuenta sobre sacarle jugo a tu patinete
Lo que vas a leer es lo que recomendamos a gente que, como tú, usa el patinete para currar, estudiar, moverse sin perder tiempo o simplemente porque le flipa ir sobre ruedas.
Y lo hacemos con ejemplos, con lo que hemos visto que funciona. Esto va de ganar seguridad, comodidad y control sin gastar por gastar.
Los accesorios que sí marcan un antes y un después
Para que no te la pegues y si te la pegas, no sea grave
Cascos cómodos, no incómodos por “seguros”
Hay cascos que protegen pero que no dan ganas de ponérselos. La clave está en encontrar uno que no pese, que no dé calor y que se ajuste bien. Si encima tiene visera y no parece sacado de un vídeo de skate de los 2000, mejor.
Luces que realmente se ven
Las luces que vienen de serie en los patinetes, muchas veces, sirven poco más que para cumplir. Ponle unas luces que se vean a distancia, que alumbren de verdad. Te ahorras sustos y te haces ver mejor.
Un retrovisor que no es de “abuelete”
Sí, un espejo. Pequeño, discreto y útil como este espejo retrovisor. En ciudad o si vas por carriles bici llenos de gente, ver lo que te viene por detrás sin girar el cuello es una bendición. Y no, no te hace menos “pro”.
Candado bueno > candado “por si acaso”
Roban patinetes. Mucho. No te lo tomes como paranoia. Un buen antirrobo no solo es más seguro, también da tranquilidad cuando aparcas un segundo para entrar al súper. ¿Y si puede conectarse con el móvil o saltar una alarma si lo tocan? Mejor.
Para que el patinete dure y no dé problemas cada dos por tres
Guardabarros que no se parten con mirarlos
¿Tienes un Xiaomi? Entonces sabes de qué hablamos. Los guardabarros originales no aguantan mucho. Ponle uno reforzado y olvídate de salpicones y piezas bailando.
Suspensión: porque la ciudad no es una alfombra
La mayoría de patinetes vienen sin ella. Si tu ruta tiene baches, bordillos o adoquines, instalar suspensión delantera o trasera cambia el juego. Lo notarás el primer día.
Ruedas que se agarran, no que resbalan
¿Macizas? ¿Con cámara? ¿Tubeless? Depende. Si no quieres pinchar, las macizas. Si buscas suavidad y agarre, tubeless o cámara reforzada. Aquí no hay una sola respuesta: hay que elegir bien según tu uso.
Soporte para el móvil: no es un lujo
El típico “no necesito GPS”. Hasta que lo necesitas. Llevar el móvil bien colocado, sin que tiemble, es un básico. Y si puedes ver datos del patinete (velocidad, batería, errores), más aún.
Para que moverte sea cómodo de verdad
Empuñaduras que no dan calambres
Las originales muchas veces son duras o resbalan. Cambiarlas por unas de espuma o silicona mejora mucho más de lo que parece. Y si sudas mucho, también lo agradecerás.
Ganchos multiuso (no solo para bolsas)
Enganchar una mochila, el casco, una bolsa con fruta. Cosas que no parecen importantes hasta que no tienes dónde colgarlas. Y luego dices: “¿cómo vivía sin esto?”.
Personalizar sin parecer una feria
Hay vinilos y pegatinas que te hacen visible (bien) y otros que parecen tuning de los 90 (mal). Si eliges bien, puedes hacer que tu patinete sea más tuyo y más seguro.
El sillín que divide a la humanidad
Hay quien lo ama, hay quien lo odia. Si haces muchos kilómetros al día, puede ser un gran aliado. Solo asegúrate de que sea desmontable y que no esté prohibido usarlo en tu ciudad.
Cómo elegir sin volverte loco (o que no te vendan la moto)
Conoce tu patinete como conoces tu móvil
No vale con decir “es Xiaomi”. Hay variantes, detalles, versiones. Cuanto mejor lo conozcas, más fácil será elegir bien. Y si no sabes, pregunta. En Anseni ayudamos a diario con eso.
Compatibilidad, esa gran olvidada
No todo lo que dice “universal” lo es. Lee bien. Fíjate si encaja con el manillar, con el freno, con la forma del chasis. Más vale tardar cinco minutos más en elegir que devolver luego.
Pocas cosas, pero buenas
No necesitas diez accesorios. Solo los que de verdad aportan. A veces con tres o cuatro bien elegidos tienes el patinete a tu medida.
Y si hay que instalar, que lo haga alguien que sepa
Hay cosas fáciles (poner un gancho), y otras que no (cambiar suspensión). Si no lo tienes claro, busca ayuda. Lo barato sale caro cuando rompes algo por probar.
Y ojo, que también hay normas
La DGT y algunos ayuntamientos piden cosas concretas: timbre, luces, reflectantes. Consulta antes de que te multen por no llevar algo que cuesta 5 euros.
Tu checklist mensual (para no acabar empujando el patinete)
- Presión de ruedas: un clásico olvidado.
- Tornillos y piezas sueltas: ajusta antes de que vibren.
- Luces y reflectantes limpios.
- Batería y conectores OK.
- Frenos: no los dejes para cuando chillan.
FAQs sin vueltas
¿Qué accesorios molan para un Xiaomi?
Guardabarros que aguanten, ruedas decentes, soporte para el móvil y luces que iluminen. Con eso ya notas el cambio.
¿Me cargo la garantía si pongo cosas?
Depende de qué y cómo. Cosas externas no suelen afectar. Si tocas motor, batería o centralita, sí. Pregunta siempre.
¿Merece la pena gastar más en buenos accesorios?
Sí. No es solo que duren más, es que te ahorran problemas y hacen tu experiencia mucho mejor.
Al final, se trata de que tu patinete trabaje para ti, no al revés
Un patinete eléctrico puede ser increíble. Pero solo si se adapta a ti. No si lo usas “como viene”. Con dos o tres accesorios bien elegidos, tu trayecto mejora. Se hace más cómodo, más seguro, más tuyo.
¿Lo quieres así? Pues empieza por lo que te molesta o te falta. Y ve mejorando poco a poco. Sin prisa, pero sin pausa.En Anseni, lo vemos cada día: quienes cuidan su patinete, lo disfrutan más. Y eso es lo que cuenta.
